Entiendo el dolor de este obispo, pero que el colegio episcopal lo tenga claro: con la "Democracia" , no puede arreglar nada. La usa el enemigo para dominar a las naciones. Hay que hablar con la verdad, y no negociar nada con el enemigo de Dios. Si el precio es el martirio, pues bienvenido sea si es para gloria de Dios. Enrique
Entiendo el dolor de este obispo, pero que el colegio episcopal lo tenga claro: con la "Democracia" , no puede arreglar nada. La usa el enemigo para dominar a las naciones.
ResponderEliminarHay que hablar con la verdad, y no negociar nada con el enemigo de Dios. Si el precio es el martirio, pues bienvenido sea si es para gloria de Dios.
Enrique