Como sea nuestra relación con nuestros hijos, sin duda será -en el futuro- su relación con nosotros.
Como sea nuestra relación con nuestros padres ancianos, será la misma que nuestros hijos, llevarán con nosotros, pues eso aprendieron de nuestro ejemplo.
Trata a tus padres ancianos y a tus hijos pequeños, como quieras ser tratado en tu vejez.
El hijo aprende lo que ve. Tu mismo serás la medida de lo que recibirás.
¡QUÉ reflexión! Me caló muy hondo
ResponderEliminarComo sea nuestra relación con nuestros hijos, sin duda será -en el futuro- su relación con nosotros.
ResponderEliminarComo sea nuestra relación con nuestros padres ancianos, será la misma que nuestros hijos, llevarán con nosotros, pues eso aprendieron de nuestro ejemplo.
Trata a tus padres ancianos y a tus hijos pequeños, como quieras ser tratado en tu vejez.
El hijo aprende lo que ve. Tu mismo serás la medida de lo que recibirás.
José Ignacio
José Ignacio:
ResponderEliminarExcelente tu conclusión.
Gracias por sus comentarios a ambos.
Atentamente
CATOLICIDAD