Jesús es el único que nunca falta, que nunca se aleja, ni por las circunstancias, ni por el tiempo, ni por las distancias.
Cuando nosotros nos encontramos con un accidente en la carretera, siempre nos impresiona, pero cuando resulta que uno de los accidentados es un conocido, un amigo, o un pariente, impresiona mucho más.
Es lo que deberíamos sentir al contemplar a Cristo crucificado: el ajusticiado es un Amigo, tu mejor Amigo; él es tu Creador, tu Redentor, la Persona que te va a juzgar en el Juicio Final. No puedes quedarte indiferente a esta muerte.
Cristo es el mejor amigo, el que siempre nos soporta y nos perdona, olvidando nuestras pequeñas o tremendas ofensas a su amor. Jesús es el único que nunca falta, que nunca se aleja, ni por las circunstancias, ni por el tiempo, ni por las distancias.
¿Por quién está muriendo?
Hay algo más sorprendente que el hecho de estar muriendo Dios en la cruz, y es el hecho de estar muriendo por ti, de una manera particular.
Tú eres importante para Cristo. No eres uno de la masa. La Pasión de Cristo es como un rompecabezas en el cual falta una pieza, y esa pieza eres tú. Cada hombre, con toda propiedad, puede decir que él es muy importante para Cristo. Cristo le amó y se entregó por él.
Pensemos que Dios dio su vida por nosotros en una cruz, que lo azotaron, lo coronaron de espinas, lo escupieron en su santísimo rostro y, en fin, perdió toda su sangre y sufrió todo eso para que nosotros nos salváramos.
¿Para qué está muriendo?
Lo hace para redimirte de tus pecados particulares, no del pecado en abstracto. Entonces tus pecados (sí, esos que estás pensando) son importantes para Dios. ¡Era necesario que el Hijo de Dios se hiciera hombre y muriese en la cruz para hacer reparación por ellos!
Corremos el riesgo de pecar tranquilamente y no ver la profundidad de nuestros pecados. Es como una persona que va a nadar en un río, pero no se da cuenta de que tiene más de 10 metros de profundidad. Es necesario no sólo tener conciencia del pecado, sino también darse cuenta de su enorme dimensión: ¡la muerte de Cristo! ¡Y qué muerte!
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Un amable lector anónimo nos recomienda bajar un libro, pero la PC indica que puede dañar nuestro procesador. En esos casos preferimos no correr el riesgo ni publicitar ninguna obra que no hubiéramos podido constatar su ortodoxia. De cualquier modo agradecemos mucho el dato y trataremos de buscarlo en alguna librería.
ResponderEliminarAtte
CATOLICIDAD
Veo normal que no publiquen el libro pero por lo menos debieran hecharle un vistazo .Yo soy catolico-apostolico-
ResponderEliminarromano y orotodoxo, nunga hubiera publicado nada que hubiera dañado a la iglesia, ni que estuviera contrastado.
Se avecina una terrible persecucion contra la iglesia,con un papa que segun todas las profecias sera puesto por la masoneria ya infiltrada en el vaticano, un aviso -cometa- y el gran milagro de garabandal , si despues de esto nada cambia, viene la 3ª guerra mundial.
Algun dia(lea bien esto)se arrepentira para su propia persona ( me refiero a su conciencia) de no haber publicado dicho libro y haber hecho un grandisimo bien, pero ya sera DEMASIADO TARDE.
Muchas gracias y un saludo.Le sigo leyendo..
Hermano:
ResponderEliminarEstamos seguros de su buena fe y que no publicaría nada que le pareciera -a usted- contrario a nuestra Iglesia.
El asunto es que:
1) Nos llega un aviso de que bajar ese archivo pude dañar nuestro procesador.
2)Debemos constatar nosotros el criterio de la obra, pues eso es un asunto de conciencia. No hacerlo sería, eso sí, motivo de arrepentimiento cuando fuera demasiado tarde.
3) En los temas proféticos debe uno ser muy cauto y prudente.
Señalamos que buscaríamos esa obra fuera de internet para evitar cualquier daño al equipo.
Por ello, le agradeceríamos nos mandara un mensaje a nuestro mail (catolicidad@hotmail.com) indicándonos los datos completos de la obra: autor, título exacto, editorial, y sobre todo los sitios dónde se puede adquirir.
Por último, es importante tener presente que en esto de las profecías es fundamental saber su origen y si están autorizadas por la Iglesia; además de ello hay que considerar la diferencia entre lo profetizado y las interpretaciones que se hacen y quién las hace. En fin, es un tema complejo y muy interesante, sin embargo algunos (no todos, por supuesto) resbalan por él.
Además, existe el peligro de que algunos den (o dan) sobrecrédito a apariciones o mensajes dudosos.
Lo que al católico consta es la Revelación que se encuentra en la Biblia y la Tradición, enseñada por el Magisterio de la Iglesia. Ése es y debe ser siempre el aspecto rector de todo lo demás, pues es nuestra fe misma. Y con base en ello lo demás se juzga. Algunos, con muy buena fe pero de manera errada, lamentablemente, anteponen a ello las profecías privadas que no son de fe y que por lo mismo no la comprometen. Invierten el orden del criterio. De ahí que debe tenerse cuidado en todo esto.
Sin conocer la obra no podemos recomendarla, tomando en consideración todo lo dicho.
Como habrá visto, en nuestro blog sí publicamos los mensajes y profecías que tienen el aval y la autorización de nuestra amada Iglesia.
Le agradecemos mucho, de antemano, la información que nos haga llegar, así como que nos siga leyendo.
Un abrazo en Cristo
Atte.
CATOLICIDAD
Toda la santidad y perfecciòn del alma consiste en amar a Jesucristo, Dios nuestro sumo Bien y salvador. El Padre -dice el propio Jesùs-os ama porque vosotros me habeìs amado. "Algunos-expone San Francisco de Sales-cifran la perfecciòn en la austeridad de la vida, otros en la oraciòn, quiènes en la frecuencia de sacramentos y quiènes en el reparto de limosnas; mas todos se engañan, por que la perfcciòn estriba en amar a Dios de todo corazòn." Ya lo decia el Apòstol San Pablo: Y sobre todas estas cosas, revestios de la caridad, que el vinculo de la perfecciòn. La caridad es quien une y conserva todas las virtudes que perfeccionan al hombre; por eso decìa San Agustìn: "Ama, y has lo que quieras", por que el mismo amor enseña al alma enamorada de Dios a no hacer cosa que le desagrade y hacer cuanto sea de su agrado. ¿Por ventura no merece Dios todo nuestro amor? El nos amò desde la eternidad....... Para granjearse nuestro amor, llegò a darse por completo a sì mismo: Porque Asi amò Dios al mundo que entregò a su hijo unigènito.Viendonos el Eterno Padre muertos por el pecado y privados de su gracia, ¿que hizo? Por el inmenso amor que nos tenìa, o como dice el Apostol, por execivo amor, mandò a su amadisimo hijo a satisfacer por nosotros y devolvernos asi la vida. Y, dàndonos al hijo-no perdonando al Hijo para perdonarnos a nosotros-, junto con el hijo nos diò toda suerte de bienes , su gracia, su amor y el paraìso, porque todos esto bienes son ciertamente de mas ìnfimo precio que su Hijo. SAN ALFONSO MARIA DE LIGORIO (pràctica del amor a Jesucristo)
ResponderEliminarExcelente comentario. Mil gracias.
ResponderEliminarUn abrazo en Cristo
Atte
CATOLICIDAD