martes, 30 de mayo de 2017

HEROICO AMOR A LA EUCARISTÍA: UN HECHO HISTÓRICO



Mons. Fulton J. Sheen quedó marcado toda su vida por este hecho histórico y se prometió honrar la Eucaristía con una visita diaria al Santísimo durante una hora. El propio monseñor lo narró de este modo cuando le preguntaron "¿Quién fue, o qué fue, lo que más le impactó a Vd. a lo largo de su vida? ¿Fue acaso el Papa actual o el anterior?" Y el obispo respondió: No fue un Papa, ni un Cardenal, u otro Obispo, y ni siquiera fue un sacerdote o una monja. Fue una niña china de once años de edad. Entonces el obispo contó la siguiente historia: Cuando los comunistas ocuparon la totalidad de China, su odio al catolicismo, les llevó a encarcelar cuando no a asesinar, a todos los religiosos y religiosas, especialmente a los que no teniendo la nacionalidad china, allí se encontraban. Uno de estos religiosos le contó al obispo Sheen, lo que había pasado en su iglesia. Le explicó que a él, lo encarcelaron en su propia rectoría cerca de la Iglesia. El sacerdote observó aterrado desde su ventana, como los comunistas penetraron en la iglesia y se dirigieron al santuario. Llenos de odio profanaron el sagrario, tomaron el copón y lo tiraron al piso, esparciendo las Hostias Consagradas. Como eran tiempos de persecución, el sacerdote había tenido la precaución, de saber exactamente cuantas Hostias contenía el copón: Treinta y dos. Una vez cometida la fechoría, los comunistas se marcharon, dejando un centinela de guardia para custodiarle a él y no permitir el culto en la iglesia. Pero no repararon, o quizás no le dieron importancia a una niña de unos once años, que rezaba al fondo de la iglesia que estaba en penumbra. La niña, observó todo lo que había sucedido, y se marchó a su casa. Pero por la noche, la niña volvió a la iglesia, evitando al centinela comunista que más se preocupaba de vigilar la rectoría donde estaba recluido el sacerdote, que la iglesia que estaba vacía, con los destrozos que sus compañeros y él mismo habían ocasionado, y lo más importante, a nuestro entender, que no al del centinela: las treinta y dos formas consagradas, desparramadas en el suelo. Una vez en la iglesia, la niña se situó en la parte de atrás de la misma rezando durante una hora; un acto de amor en reparación del odio que habían mostrado sus hermanos de raza. Después de su hora santa, la niña se adelantó con mucho sigilo hacia el presbiterio, se arrodilló, y bajando la cabeza hasta el suelo con su lengua tomó una de las sagradas formas, que allí estaba desperdigadas. Téngase en cuenta que en aquella época el ayuno era riguroso, sin comer ni beber doce horas antes. La pequeña continuó regresando todas y cada una de las noches siguientes, haciendo primero su hora santa y acercándose después al presbiterio, para tomar con la lengua el cuerpo de Nuestro Señor. En la trigésima segunda noche, después de haber realizado la última comunión, tropezó provocando accidentalmente un ruido que despertó al comunista que estaba de guardia. La pequeña, trató de huir pero el comunista corrió detrás de ella, la agarró, y la golpeó hasta matarla con la culata de su rifle (el video actuado señala un balazo inexistente -menos cruel que la golpiza-, aunque el resultado fue el mismo: el martirio de la pequeña). Este acto de martirio heroico fue visto, desde la rectoría por el sacerdote que, sumamente abatido, miraba desde la ventana de su cuarto donde estaba recluido sin poder hacer nada. El Obispo Sheen le manifestó al entrevistador, que cuando escuchó el relato, se quedó tan impactado, que prometió al Señor, que haría una hora santa de oración frente a Jesús Sacramentado todos los días, por el resto de su vida. Si aquella pequeña niña china, había sido capaz y pudo dar testimonio con su vida, de la presencia real de Jesús en el Santísimo Sacramento, entonces el obispo se veía obligado a lo mismo. Su único deseo desde entonces sería, atraer el mundo al Corazón Ardiente de Jesús en el Santísimo Sacramento.

Tú, por tu parte, ¿qué estás dispuesto a hacer para honrar a Jesús sacramentado? Comprométete ante el Señor a no recibir la Eucaristía jamás en la mano y frecuentarla lo más posible (siempre en estado de gracia santificante, pues comulgar en pecado mortal -sin haberse confesado- es un gravísimo sacrilegio).

Recibámoslo en la boca y de rodillas. Ver las fundamentales razones para jamás recibirlo en la mano, haz clic aquí: Porqué rechazar la comunión en la boca



lunes, 29 de mayo de 2017

NO VIVAS NI UN SOLO DÍA EN PECADO MORTAL

"Si alguno dice o siente que el castigo de los demonios o de los hombres impíos (los condenados) es temporal y que en algún momento tendrá fin, o que se dará la reintegración (la redención) de los demonios o de los hombres impíos, sea anatema". (Denzinger-Hünermann, 411 o Denz. 211. Canon 9 del II Concilio de Constantinopla, confirmado por el Papa Vigilio. Cánones contra Orígenes, del emperador Justiniano, del año 543).

Haz clic aquí: ¿PUEDE DIOS PERDONARME SI NO HAY UN CONFESOR?

viernes, 26 de mayo de 2017

LA ALEGRÍA CRISTIANA

Ya Alumbra la luz para el justo y la alegría para los rectos de corazón (Sal. 96, 11)


Queridos hermanos, suelen oír con relativa frecuencia que el cristiano no debe estar triste, ni melancólico, que no ha de poner cara de tal o cual, que la fe cristiana nos tiene que mantener alegres. ¿Pero cuál es la verdadera alegría del cristiano? Hay alegría nociva y hay alegría inocente y santa. La primera no debe llamarse alegría porque es fuente de amargura y tristeza. La alegría inocente y santa es la que constituye el verdadero torrente de paz y consuelo para el alma.

El origen de la verdadera alegría es la virtud. Donde hay mayor virtud, hay mayor alegría; y donde está la virtud perfecta, allí se encuentra la perfecta y única alegría. La alegría cristiana es verdadera cuando precede de la virtud, entonces es santa en su origen, santa en sus motivos y santa en sus obras.

Sólo podemos ser felices poseyendo al Señor y gozando de Él. Nuestra alegría es más o menos perfecta según la mayor o menor perfección de nuestras virtudes, en las que consiste la posesión de Dios. Cuando verdaderamente amamos a Dios, le poseemos, y tal posesión es la fuente inagotable de verdadera alegría; una alegría como nunca podrá sospechar el mundo. Ni las adversidades más terribles que sobrevengan, ni las angustias que nos aflijan, ni los sufrimientos que se experimenten, pueden turbar la interior alegría de los que poseen a Dios sin temor de perderle, como no sea por su propia pecado. Reboso de gozo en todas nuestras tribulaciones (2 Cor. 7, 4). Poseyendo a Dios por la virtud, el corazón está totalmente ocupado en amar; y entonces, ni la pérdida de las riquezas le turba, ni las contrariedades le inquietan, ni la ambición tiene cabida en él, porque sólo Dios ocupa todas las potencias del alma.

He aquí la verdadera alegría cristiana, la que todos hemos de desear, aspirar y luchar por conseguir. Es la alegría de quien tiene al Señor porque ha renunciado decididamente al pecado, con todas las fuerzas, y sólo deseo agradar a Dios, y hacer su santa voluntad. Es la alegría de quien ha llegado a renunciar a su propio yo personal, y sólo busca complacer a Dios con indiferencia total a su propia vida, sabiendo que el Señor dispone enteramente de ella, a su gusto y placer.

Sólo una puerta tiene la tristeza para penetrar en el alma virtuosa, la puerta del propio pecado. Pero el amor a la virtud, a la fidelidad a Dios, la mantendrá siempre cerrada. Si se pierde a Dios, entonces está todo perdido; y la tristeza del alma no tendría límites. El alma virtuosa ve con horror el pecado, no puede ni siquiera pensar en él, pues no tiene más deseos que agradar al Salvador. Toda la alegría del alma virtuosa consiste en saborear los divinos deleites que brotan de las Sagradas Llagas del Redentor.

Queridos hermanos, cuánta es la tristeza y desolación de quienes andan sumidos en los goces del mundo, que son los goces de la carne; aquí buscan su falsa y angustiosa alegría. La falsa alegría de la complacencia de los gustos personales, de la satisfacción de los propios deseos. Siempre la carne que mueve al hombre, siempre el oscuro deseo del placer; la constante obstinación de no hacer la voluntad divina, es más, la osadía temeraria y obscena de querer rebajar a Dios al nivel de la propia debilidad humana. El hombre en su pecado de soberbia se atreve a vivir según su propia voluntad, alejado del mandato divino. La alegría del mundo es perniciosa en su origen, lo es en sus motivos y lo es sus fines.

La alegría cristiana es santa en sus motivos, pues el alma virtuosa medita las perfecciones de Dios, las maravillas de sus obras, sus beneficios temporales y sus promesas eternas. Me has alegrado, ¡oh Señor!, con tus obras, y me gozo en las obras de tus manos (Sal. 91, 5). El gozo del salmista son las obras de Dios. Grande son la alegría y felicidad del alma virtuosa cuando considera las incomprensibles perfecciones de Dios; si busca la inmensidad, la ve personificada en Dios; si pretende encontrar la omnipotencia, en Dios la encuentra y se somete a ella; si aspira a la santidad, en Dios tiene el modelo perfectísimo; si busca la justicia o la misericordia, la fe le enseña que sólo Dios es infinitamente justo y misericordioso. Examinando y meditando las perfecciones de Dios, el alma queda extasiada y sobrecogida de ver como todo lo ha previsto el Creador. Como todo está perfectamente ordenado para la gloria de Dios y bien del hombre. Como todo lleva a Dios. Después de haber esperado en tu piedad, que se alegre mi corazón en tu socorro, que pueda contar del Señor: Bien me proveyó (Sal. 12, 6).

La alegría cristiana es verdadera, porque es santa en sus obras; causa tranquilidad de conciencia en todas sus acciones y obras, así como perplejidad y desconcierto en el mundo, que no puede entender que tal paz interior y serenidad provenga de la virtud, de la santidad, del amor a Dios por encima de todas las cosas. El pecador encontrándose fuera de su propio centro, es decir, alejado de Dios, busca infructuosamente su tranquilidad y reposo de objeto en objeto, de diversión en diversión, de placer en placer. La alegría que busca el pecador está viciada en su origen, porque su origen es el amor que pone en las criaturas, en lugar de ponerlo en Dios. Nunca satisfará su corazón, y la alegría con la que sueña se convertirá en melancolía y tristeza. La alegría que busca el pecador también está viciada en sus efectos. El afán de placer, de lucro, de comodidad; huye del esfuerzo, del sacrificio, de la abnegación; Dios nada tiene que ver en su vida; todas sus acciones son causa de frustración, y tienen su origen en el pecado.

Todo lo contrario sucede con la verdadera alegría a cristiana, santa en su origen, en sus medios y en sus efectos, que proporciona al que la experimenta una verdadera expansión del alma que contagia a los que le rodean. Alegraos en el Señor. ¡oh justos! Y honrad su santo nombre (Sal. 96, 12). Alegraos siempre en el Señor, de nuevo os lo digo: alegraos (Flp. 4, 4). Esta es la verdadera alegría del alma, la verdadera alegría cristiana, la que proviene de hacer la voluntad divina, de cumplir perfectísimamente los mandamientos de la Ley de Dios.

El alma se alegra en el Señor, porque ha renunciado a sí misma, a sus propios gustos, deseos e iniciativas, porque se niega a sí misma, porque en la oración, sacrificio y penitencia domina su soberbia y combate al maligno que como león rugiente ronda constantemente. El Señor hace al alma virtuosa, porque el alma busca la virtud no escatimando esfuerzos y sacrificios para ello. El alma que encuentra al Señor, que lo posee, lo encuentra todo en su vida, lo tiene todo en su vida, nada busca, únicamente conservar al amor divino en su alma y engrandecerlo; porque el alma presiente la infinitud divina de Dios, haciendo que aquella desee constantemente amar más y más, con un deseo inagotable, que no cesa, que no se satisface porque no puede abarcar la divinidad infinita.

Qué distinta es la alegría cristiana de la del mundo, (pero también de la que nos presentan los modernistas), verdadera caricatura de la alegría cristiana. Los justos y virtuosos son los verdaderamente alegres, porque poseen a Dios renunciando a sí mismos.

Ave María purísima.

Padre Juan Manuel Rodríguez de la Rosa

Fuente: Adelante la Fe

miércoles, 24 de mayo de 2017

24 DE MAYO: DOS GRANDES ADVOCACIONES DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA

MARÍA AUXILIADORA Y LA VIRGEN DEL ROCÍO (LA BLANCA PALOMA)



Palabras dadas por Don Bosco a sus alumnos el 20 de mayo de 1877:

“En esta próxima fiesta de María Auxiliadora, si viniesen a veros y, si no vienen, escribiéndoles una carta, o dándoles recado en familia, decidles de mi parte: -Don Bosco os asegura que si queréis obtener alguna gracia espiritual, recéis a la Virgen con esta jaculatoria: María Auxilium Christianorum, ora pro nobis, y seréis escuchados. Se entiende que se rece con las condiciones que ha de tener toda oración.

Si no sois escuchados, haréis un favor a Don Bosco escribiéndole.

Si yo llego a saber que uno de vosotros ha rezado bien, pero en vano, escribiré inmediatamente una carta a San Bernardo diciéndole que se equivocó cuando dijo: "Acuérdate, ¡oh piadosísima Virgen María!, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a tu protección haya sido abandonado...".

Pero, podéis estar seguros de que no ocurrirá que tenga que escribir una carta a san Bernardo.

Y, si tal me ocurriese, entonces el santo Doctor sabrá encontrar en seguida algún defecto en la oración del suplicante."

En esta fecha también se celebra la advocación de la Virgen del Rocío

Origen: En el siglo XV, en España, un hombre que apacentaba su ganado no lejos de Almonte (Huelva, Andalucía), oyó a sus perros ladrar insistentemente. Se adentró en una zona llena de maleza y espinos donde encontró sobre el tronco de un árbol, una imagen. De belleza sin igual, no había sido maltratada por el tiempo ni la intemperie. Sacó la imagen sobre sus hombros y emprendió viaje a la aldea. La fatiga y el cansancio hicieron que se parase a dormir.

Tras despertarse vio que la imagen había desparecido. Volvió al lugar donde la había encontrado, y allí estaba, intacta la Virgen. Corrió a la aldea y contó lo que le había sucedido; las gentes del pueblo acudieron al lugar, sacaron la imagen de la maleza y la llevaron a la iglesia mayor de la aldea mientras se le construía un templo. Más tarde se erigió una ermita en su honor.

Imagen relacionada


La Romería del Rocío es una de las más famosas y multitudinarias que existen y constituye la emblemática expresión de la religiosidad popular de Andalucía y sus gentes. Dura una semana, contando con el camino que recorren los peregrinos hasta la Aldea de Almonte donde se encuentra la ermita.

Los romeros vestidos con traje flamenco, a pie, a caballo o en carretas tiradas por asnos o bueyes avanzan. De día con alegría, entonando cantos y coplas. De noche acampan al aire libre alrededor de una hoguera, se organiza una fiesta, se canta, se baila, se comparte comida y vino de la tierra hasta bien entrada la madrugada.

En un desfile colorista y emotivo millones de peregrinos llegan a la ermita del Rocío. Las hermandades se presentan, los romeros a pie, los jinetes, las carretas engalanadas van desfilando ante la ermita.

La Salve Rociera es una de las canciones más emblemáticas y bellas a la Virgen del Rocío, a la que también llaman la Blanca Paloma. En ella se dice que todo su pueblo la "adora" no en un sentido de estricto, pues el culto de latría (de adoración) solo se brinda a Dios, sino en un sentido popular que significa cariño y veneración como cuando se dice a una madre o a una esposa que se le "adora".




lunes, 22 de mayo de 2017

DEBEMOS PEDIR PERDÓN A DIOS POR NUESTROS PECADOS DE IGNORANCIA CULPABLE

"Si la ignorancia no puede ser nunca pecado (como falsamente arguyen), ¿por qué en la Epístola a los Hebreos se dice que el sumo Sacerdote entraba una vez al año en el “Sancta Sanctorum” y llevaba la sangre de las víctimas para ofrecerla al Señor por sus ignorancias y por las de su pueblo?": San Bernardo.


domingo, 21 de mayo de 2017

"HAY QUE TRABAJAR POR LA CONSAGRACIÓN DE RUSIA AL INMACULADO CORAZÓN DE MARÍA": CARDENAL BURKE

En el transcurso de su conferencia “El secreto de Fátima y la Nueva Evangelización”, impartida el 19 de mayo de 2017, el cardenal Burke, en presencia del cardenal Cafarra y de Mons. Schneider, llamó a “trabajar por la consagración de Rusia al Inmaculado Corazón de María”. “La consagración solicitada es a la vez un reconocimiento de la importancia que Rusia sigue teniendo en el plan de Dios para la paz y un signo de profundo amor por nuestros hermanos y hermanas en Rusia”, dijo.

Señaló que la Virgen ha pedido lo siguiente para traer paz a la Iglesia y al mundo:


-Rezar el Rosario diariamente.
-Llevar el escapulario.
-Hacer sacrificios en aras de salvar a los pecadores.
-Reparar las ofensas a su Inmaculado Corazón por medio de la devoción de los primeros sábados de mes.
-Convertir nuestras vidas cada vez más a Cristo.
-Por último, se pide al Romano Pontífice, que en unión con todos los obispos del mundo, consagre explícitamente a Rusia a su Inmaculado Corazón.

Se mostró de acuerdo con uno de los principales estudiosos de Fátima, el Hermano Michel de la Sainte Trinité, quien dijo que el triunfo prometido del Inmaculado Corazón de María se refiere, sin duda, en primer lugar, a “la victoria de la Fe, que pondrá fin al tiempo de apostasía y a las grandes deficiencias de los pastores de la Iglesia".

LAS CONSAGRACIONES HECHAS HASTA AHORA NO CUBREN TODAS LAS CONDICIONES PEDIDAS POR LA VIRGEN

- Pío XII consagró a Rusia al Corazón Inmaculado (el 7 de julio 1952), pero no participaron todos los obispos del mundo. (Esta era una condición indispensable, según lo pedido. Participando TODOS consagra la Iglesia Universal, sin su participación se hace en nombre de la Iglesia.)

Después se intentó varias veces, pero sin éxito. No se consagró Rusia sino el mundo. En 1967 fueron publicadas las "Memorias de Sor Lucía", en las que nos revela la urgencia del pedido: la Consagración de Rusia.

- Juan Pablo II lo intentó el 13 de mayo 1982. Pero no se consagró Rusia, sino el mundo. Declarando en L'Osservatore Romano (19.5.1982), que "había tratado de hacer todo lo posible, dadas las circunstancias."

- El "acto de consagración" del mundo, de 1982 no satisfizo el pedido, pues tampoco hubo participación de todos los obispos, ni mención de Rusia.

- Juan Pablo II lo intentó de nuevo el 25 de marzo de 1984, pero fue consagrado otra vez el mundo. No participaban todos los obispos y Rusia no fue mencionada explícitamente en ese acto de consagración.

Después del acto, el Papa rezó: "Iluminad especialmente a las gentes de las cuales Vos misma estáis esperando nuestra consagración y entrega."

Al día siguiente, 26 de marzo de 1984, L'Osservatore Romano, citó esas palabras, exactamente igual como las había pronunciado: «Iluminad ...».

- El acto de consagración del mundo, de 1984, no satisfizo el pedido, de Fátima. No fue válido de acuerdo a lo que había sido pedido.

Sor Lucía misma declaró en una entrevista a la revista "Sol de Fátima", en septiembre de 1985, que "el acto del 25 de marzo de 1984 no satisfizo el pedido de Nuestra Señora, porque no hubo la participación de todos los obispos, ni mención específica de Rusia."

Sor Lucía confirmó al periodista Enrico Romero, el 20 de julio 1987: «La Consagración de Rusia, todavía no ha sido realizada, porque Rusia no fue nombrada explícitamente.»

Y Juan Pablo II reconoció después de la ceremonia de 1984, que la Santísima Virgen todavía espera la consagración de otras gentes (Rusia): «Iluminad especialmente las gentes, de las cuales Vos misma estáis esperando nuestra Consagración y entrega.» -C.f. L´Osservatore Romano.

A partir de 1989 aparecieron supuestas cartas de Sor Lucía, escritas a máquina y en PC, diciendo que el Cielo aceptó la consagración del mundo de 1984. (Sor Lucía ni escribía a máquina, ni en PC.). Son falsas.

El 13 de mayo de 1990, en Fátima, la Virgen le dijo al Padre Stefano Gobbi, fundador del MMS, que la Consagración de Rusia, pedida en Fátima no fue realizada válidamente aún.

CONCLUSIÓN:
RUSIA NO HA SIDO CONSAGRADA VÁLIDAMENTE como fue pedido en Fátima.

viernes, 19 de mayo de 2017

miércoles, 17 de mayo de 2017

SIGNO DE ESPERANZA EN SIRIA: CONSAGRAN LA CIUDAD DE ALEPO A LA VIRGEN DE FÁTIMA


  • ROMA, 15 May. 17 (ACI).- La ciudad de Alepo, liberada del control de los rebeldes y grupos yihadistas a fines del 2016, pero que aún sufre las consecuencias de la guerra civil en Siria, fue consagrada este 13 de mayo a la Virgen de Fátima, al conmemorarse los 100 años de esta apariciones marianas en Portugal.

    La Misa de consagración se realizó en la Catedral Latina de San Francisco de Asís, que también es conocida como la Iglesia Latina de los Franciscanos. 

    El sacrificio de la Misa tuvo lugar el mismo día de la canonización de los pastorcitos San Francisco Marto y Santa Jacinta Marto en el Santuario de Fátima.

    Según indicó la Catedral Latina de San Francisco de Asís a través de su página de Facebook, en la Misa de consagración estuvo presente una imagen de la Virgen de Fátima que fue enviada directamente desde el santuario en Portugal.

    Después de la misma, la imagen fue llevada en procesión por el barrio cristiano de al-Azizieh, que sufrió constantes ataques de los grupos rebeldes.

    A través de su Facebook, SOS Cristianos en Siria señaló que el templo estaba lleno de fieles y que varios estaban alegres y emocionados porque hacía muchos años que no se realizaba una procesión con la imagen de la Virgen de Fátima.

    “Demos gracias a Dios por este día de cielo que nos tocó vivir y encomendemos a los cristianos de Alepo a nuestra Santísima Madre. Que ella, Reina de la Paz, ya que dió al mundo al Príncipe de la Paz, nos conceda la tan anhelada paz para Medio Oriente y el mundo entero”, expresaron.
    La consagración de Alepo fue parte del programa de actividades organizadas por la Catedral Latina de San Francisco de Asís con ocasión del centenario de las apariciones de la Virgen en Fátima.

    La catedral indicó a través de su página de Facebook que las celebraciones comenzaron el día 11 con una oración comunitaria y una procesión con la imagen de la Virgen enviada desde Fátima.

    “Muchos de nosotros lloramos porque después de seis años podemos volver a organizar la procesión por las calles de Alepo sin miedo a los misiles. Con emoción acogemos a la Virgen de Fátima en Alepo y con la esperanza de que la Virgen María rogará por la paz para toda Siria”, expresaron.

    El 13 de octubre de 2016, en el cierre de la última peregrinación internacional del año en el Santuario de Fátima, el Obispo de Leiria-Fátima, Mons. Antonio Marto, bendijo una imagen que sería enviada a la “diócesis mártir” de Alepo.

    Actualmente en esta ciudad las condiciones de vida son muy duras porque escasean los alimentos, los medicamentos y aún no se han restaurado los servicios de electricidad y agua.


martes, 16 de mayo de 2017

INTENTAN DEGOLLAR A UN SACERDOTE MEXICANO MIENTRAS OFICIABA MISA EN LA CATEDRAL METROPOLITANA

  • CRISTIANOFOBIA EN LA CAPITAL MEXICANA
  • EL SACERDOTE SE ENCUENTRA GRAVE, OREMOS POR ÉL
  • CORREN RUMORES NO CONFIRMADOS SOBRE LA NACIONALIDAD Y LA PRESUNTA IDEOLOGÍA DEL SACRÍLEGO CRIMINAL 
  • LA ARQUIDIÓCESIS CONDENÓ EL BRUTAL ATENTADO CONTRA EL PADRE MIGUEL ÁNGEL MACHORRO



Ciudad de México, 16 de mayo de 2017. Gravísimo sacrilegio estilo terrorista ocurrió ayer en la tarde en la Catedral Metropolitana de la capital mexicana. De acuerdo con el testimonio de los testigos, el agresor subió al presbiterio y cuando un sacerdote finalizaba la celebración de la Misa, lo tomó por el cuello y lo intentó degollar. La arquidiócesis señaló que el padre Miguel Ángel Machorro pudo librarse, aunque fue gravemente herido cerca del pulmón con un objeto punzocortante.

El sacerdote, que perdió mucha sangre, fue traslado al hospital, donde ingresó al quirófano, mientras que el agresor fue consignado a las autoridades. Hasta el momento no se ha informado oficialmente la causa del sacrílego atentado. Existen rumores sobre la nacionalidad (se dice que francesa) y sobre la presunta ideología del agresor por el modo que actuó (como lo hacen determinados terroristas), pero falta que esto sea confirmado -o no- oficialmente.

El Cardenal Norberto Rivera Carrera pidió a los fieles católicos elevar sus oraciones por la salud del padre Miguel Ángel Machorro.

Más tarde en conferencia de prensa, señalaron que el sacerdote se debate entre la vida y la muerte y agradecieron la pronta intervención de las autoridades capitalinas así como el apoyo del jefe de Gobierno, Miguel Ángel mancera, quien les dijo que se están realizando las investigaciones correspondientes.

Fuentes: Mundo Dividido, La Jornada, InfoCatólica y otras.

domingo, 14 de mayo de 2017

CONSAGRAN OFICIALMENTE EL ESTADO DE GUANAJUATO AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

  • Un acto que traerá, sin duda, muchas gracias a ese estado del país (México)
  • Miguel Márquez Márquez, un gobernador con pantalones de verdad
  • Dijo Cristo: "Yo os digo que quien me reconociere delante de los hombres, también Yo lo reconoceré delante de mi Padre que está en los cielos, pero a quien me negare ante los hombres, también Yo lo negaré ante mi Padre" 



sábado, 13 de mayo de 2017

CENTENARIO DE LAS APARICIONES DE LA SANTÍSIMA VIRGEN EN FÁTIMA

"Para salvarlos, el Señor quiere establecer en el mundo la devoción a mi Corazón Inmaculado"



Los tres pastorcitos de Fátima: Francisco, Jacinta y Lucía, siendo tan solo unos niños, nos dejaron una admirable lección de amor a Dios, nos demostraron su entrega a la oración, su gran valor para soportar las pruebas y la fuerza de voluntad para ofrecer actos de penitencia para la salvación de las almas.

¿Qué es lo que nosotros podemos hacer para ser como estos pastorcitos?

▫ Confesarnos y pedir perdón. Realizar confesiones frecuentes con un verdadero arrepentimiento y una firme intención de no volver a pecar. 

▫ Detestar el pecado mortal y preferir la muerte antes que caer de nuevo en él. La devoción de las tres avemarías pidiendo a la Señora nos ayude a ello -como se explica aquí- será de gran utilidad para esto.

▫ Rezar muchas veces la primera oración enseñada por el Ángel de la paz:
“Dios mío, yo creo, adoro, espero y te amo. Te pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no te aman”.

▫ Rezar antes/después de comulgar y frente el Santísimo, la oración enseñada por el Ángel de la paz:
“Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, te ofrezco el preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los sagrarios de la tierra, en reparación de los ultrajes, sacrilegios e indiferencias con que Él mismo es ofendido. Y por los méritos infinitos de su Santísimo Corazón y del Corazón Inmaculado de María, te pido la conversión de los pobres pecadores”.

▫ Rezar el Rosario todos los días, recitando después de cada misterio, la oración enseñada por la Virgen:
"Jesús mío, perdónanos, líbranos del fuego del infierno, lleva todas las almas al cielo, especialmente a las más necesitadas".

▫ Realizar la devoción de los primeros sábados de mes pedida por nuestra dulcísima Madre.

▫ Practicar y difundir la devoción al Inmaculado Corazón de María, iniciando con la consagración al mismo.

▫ Vivir castamente en nuestras costumbres y modas.

NOTA: Se recomienda ver hoy este filme (haz clic): LA SEÑORA DE FÁTIMA y si no lo has hecho, leer el artículo que publicamos ayer: FÁTIMA NOS ENSEÑA A ESCRUTAR EL CIELO


RECORDATORIO DE ORACIÓN DE LOS DÍAS TRECE DE CADA MES

Cada día trece de mes, fecha de las apariciones de la Virgen en Fátima, los lectores y editores de este sitio rezaremos cinco minutos y pediremos por estas intenciones:

1) Por las peticiones particulares así como por las necesidades espirituales y materiales de todos y cada uno de los lectores de CATOLICIDAD.

2) Por el fin del proceso de "autodemolición" en la Iglesia Católica.

3) Por la intención de que, tal como lo pidió la Virgen en Fátima, el Papa finalmente consagre Rusia al Inmaculado Corazón de María y pida la conversión de ese país al catolicismo, nombrando -para ello- a esta nación de manera explícita, en unión con todo el episcopado mundial.

4) Por la reparación a Dios de nuestros pecados y por la de todas las ofensas que recibe, particularmente por las blasfemias que se profieren o los sacrilegios que se realizan.

5) Por la conversión de los pecadores, especialmente los más necesitados de la misericordia divina.

6) Por que se multipliquen las vocaciones sacerdotales y los sacerdotes vivan una vida de santidad conforme al Corazón de Cristo.

7) Por el triunfo del Inmaculado Corazón de María y la implantación del Reinado Social de Cristo en nuestras naciones.

8) Por la paz mundial, no como la da el mundo sino como la da N.S. Jesucristo y por el triunfo de la vida en las legislaciones.

9) Por la salvación propia y la de nuestros familiares, amigos y conocidos.

10) Por todas las necesidades de la Iglesia.

Bastará rezar:

-Un Señor mío Jesucristo: 
  • "Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, me pesa de todo corazón haber pecado, porque he merecido el infierno y perdido el cielo, y sobre todo, porque te ofendí a ti, que eres bondad infinita, a quien amo sobre todas las cosas. Propongo firmemente, con tu gracia, enmendarme y alejarme de las ocasiones de pecar, confesarme y cumplir la penitencia. Confío me perdonarás por tu infinita misericordia. Amén."
-Un Padre Nuestro
-Tres Aves Marías pidiendo que la Virgen nos preserve del pecado mortal durante las tentaciones (ver AQUÍ).
 -Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos.
(Nota:  Todo católico debe saber de memoria las oraciones anteriores, al igual que el Credo. Si alguien no las sabe, puede aprenderlas haciendo click AQUÍ)
-La oración de la Virgen de Fátima: 
  •  "Oh Jesús mío, perdónanos y líbranos del fuego de infierno, lleva al Cielo a todas las almas, socorre especialmente a las más necesitadas de tu misericordia".
-Finalizando así: 
  • "Señor: te pedimos por todas las necesidades de la Iglesia, por la Consagración de Rusia tal como se pidió en Fátima, por el triunfo del Inmaculado Corazón de tu dulcísima Madre, por la implantación de tu Reinado Social y de tu Paz en nuestras naciones, por la santidad de los sacerdotes y por el aumento de las vocaciones sacerdotales, así como por el triunfo de la vida y la familia en nuestras legislaciones. Te ofrecemos nuestra vida entera en reparación de los pecados propios y de las ofensas que se hacen a tu sacratísimo nombre, así como por los graves sacrilegios que se realizan en todo el mundo. Finalmente ponemos en tus manos, por intercesión de la Santísima Virgen María, todas las necesidades espirituales y materiales, tanto propias como las de nuestros familiares, amigos y conocidos, y las de nuestros hermanos lectores y editores del blog CATOLICIDAD.
  • - Inmaculado Corazón de María, encadena a tu Corazón a toda la familia mía.
  • -Inmaculado Corazón de María, sed la salvación del alma mía.
  • -Santísima Virgen de Guadalupe, salva nuestra Patria, conserva nuestra fe y defiéndenos de los falsos pastores.
  • -San Miguel Arcángel, ampáranos de las asechanzas del demonio.
  • -San Pío V, ruega por nosotros. Amén".

viernes, 12 de mayo de 2017

FÁTIMA NOS ENSEÑA A ESCRUTAR EL CIELO


Cien años después, las apariciones de Fátima de 1917 todavía nos transmiten muchas enseñanzas. Entre otras, nos invitan a aprender a interpretar las señales del Cielo. Cada una de las apariciones de la Virgen a los tres pastorcillos de Fátima estuvo acompañada de fenómenos atmosféricos.

El más extraordinario tuvo lugar el del 13 de octubre de 1917. La propia Virgen anunció a la pequeña Lucía, única de los tres videntes con quien hablaba, que sus apariciones concluirían con un milagro para que todos tuvieran certeza de la autenticidad del mensaje: «El último mes haré el milagro para que todos crean». Decenas de millares de personas entre peregrinos y escépticos ansiosos de demostrar la falsedad de las apariciones se congregaron el 13 de octubre en Cova de Iría. Los diarios de la época mencionaron la presencia de entre 40.000 y 50.000 personas, pero sin duda el número de asistentes fue mucho mayor. Al final de la última conversación de Lucía con Nuestra Señora, en el momento en que la Santísima Virgen se elevaba al Cielo, se oyó el grito de la pastorcita: «¡Mirad el sol!».

Las nubes se abrieron dejando ver el sol, que lucía con una intensidad inaudita pero sin cegar a los que miraban. «Lo más sorprendente era poder contemplar el disco solar durante un buen rato, irradiando luz y calor, sin que lastimara los ojos ni dañara la retina», atestiguó José María de Almeida Garrett, catedrático de ciencias naturales de la Universidad de Coimbra.

El periodista Avelino de Almeida, redactor jefe del diario socialista lisboeta O Século, que hasta entonces se había burlado de los sucesos, escribió el 15 de octubre en el mencionado periódico: «La ingente multitud se vuelve hacia el sol, que aparece en el cenit despejado de nubes.El astro parece un disco oscuro de plata, y es posible fijar la mirada en él sin el más mínimo esfuerzo. No quema ni ciega. Diríase que se está produciendo un eclipse, y de pronto suena un grito estruendoso, y se oye exclamar a los espectadores más próximos: “¡Milagro, milagro! ¡Maravilla, maravilla!”».

Antonio Borelli Machado describe el fenómeno con estas palabras: «El disco solar comenzó a girar vertiginosamente. Su contorno adquirió un color escarlata, y se alejó en el cielo como un torbellino que despedía rojas llamas. Esta luz se reflejaba en el suelo, sobre las plantas y arbustos, en el rostro mismo y en la ropa de los presentes, adquiriendo tonalidades brillantes y colores diversos. Por tres veces, como si estuviera animado por un movimiento propio, el globo de fuego parecía temblar, sacudirse y precipitarse zigzagueando sobre la aterrorizada muchedumbre. Todo esto duró cerca de diez minutos».

El abogado Dominhos Pinto Coelho escribió en el diario católico O Ordem: «En algunos momentos el sol estaba rodeado de llamas color carmesí; en otros, tenía una aureola amarilla y roja. Y en otros pareció girar a una velocidad asombrosa, y todavía pareció separarse del cielo para acercarse a la Tierra». Manuel Nunes Formigão, sacerdote del seminario de Santarem, cuenta a su vez: «El sol se puso a girar a una velocidad vertiginosa sobre su propio eje, como el más espléndido fuego de artificio que quepa imaginar. Adquirió todos los colores del espectro y arrojaba destellos de luz multicolores. Este espectáculo sublime e incomparable se repitió por tres veces y duró cerca de diez minutos. Abrumada por la evidencia de tan tremendo prodigio, la inmensa multitud se puso de rodillas». Finalmente, el sol regresó zigzagueando al punto del que se había precipitado, y quedó de nuevo tranquilo y resplandeciente, con el mismo fulgor de todos los días.

La «danza del sol» del 13 de octubre es un hecho histórico atestiguado por millares de personas que lo han descrito con todo lujo de detalles. En 1967, el canónigo Martins dos Reis dedicó una obra entera al estudio de dicho prodigio (O Milagre do Sol e o Segredo de Fátima, Ed. Salesianas, Oporto, 1966). Pero la Virgen anunció a los tres pastorcitos otro fenómeno celeste. El 13 de julio les dijo: «Cuando veáis que la noche se ilumina con una luz desconocida, sabed que es la gran señal que Dios os da de que se dispone a castigar al mundo por sus crímenes, mediante la guerra, el hambre y la persecución de la Iglesia y del Santo Padre».

El 25 de enero de 1938 los cielos de toda Europa se iluminaron con una grandiosa aurora boreal. Los periódicos hablaron de un suceso «extraordinario», «rarísimo» y «visible en toda Europa». Sor Lucía estaba convencida de que se trataba de la señal premonitoria anunciada por la Virgen. Actualmente los historiadores concuerdan en que la guerra mundial se inició en efecto en Europa en 1938, el año de la anexión de Austria (en marzo) y de la ocupación de los Sudetes (en octubre) por parte de la Alemania hitleriana.

Una segunda aurora boreal iluminó el cielo el 23 de septiembre de 1939: «Aquella noche –cuenta en sus memorias el jerarca nazi Albert Speer– nos entretuvimos con Hitler en la terraza del Berghof admirando un raro fenómeno celeste: durante cerca de una hora, una intensa aurora boreal iluminó con una luz rojiza el legendario Untersberg que teníamos enfrente, mientras la bóveda celeste parecía una paleta con todos los colores del arco iris. No se habría podido representar con más dramatismo el último acto de El crepúsculo de los dioses. Teníamos además el rostro y las manos bañados en un rojo espectral. Este espectáculo nos suscitó una profunda inquietud. De pronto, Hitler se volvió hacia uno de sus consejeros militares y le dijo: “Hace pensar en mucha sangre. Esta vez no podremos menos que emplear la fuerza”».

Aquella misma noche se firmó el pacto Von Ribbentrop-Molotov, sancionando la desgraciada alianza entre Hitler y Stalin, punto culminante de la guerra que estallaba. Los terribles sufrimientos causados por la Segunda Guerra Mundial no fueron, sin embargo, suficientes para hacer escarmentar a la humanidad, que en los últimos setenta años se ha ido precipitando cada vez más en un abismo de pecados públicos de todo género. Desgraciadamente, los acontecimientos que el Señor reveló a Sor Lucía el 3 de enero de 1944 corresponden a nuestro futuro: «Sentí el espíritu inundado por un misterio de luz que es Dios, y en Él vi y oí la punta de la lanza como llama que se separa, toca el eje de la Tierra y la hace temblar: montañas, ciudades, países y aldeas son sepultados junto con sus habitantes. El mar, los ríos y las nubes se salen de sus límites. Se desbordan, inundan y arrastran consigo en un torbellino casas y personas incontables. El mundo se purifica así del pecado en el que está inmerso».

Las guerras y persecuciones predichas por la Virgen en Fátima vendrán acompañadas de terribles trastornos atmosféricos, pero serán precedidos con toda verosimilitud de una gran señal del cielo, del cual las auroras boreales de 1938-1939 no fueron sino un anticipo. El 3 de enero de 1944, en el acelerado palpitar de su corazón y su espíritu, la hermana Lucía oyó una voz suave que decía: «Con el tiempo, una sola fe, un solo bautismo, una sola Iglesia santa, católica y apostólica. ¡En la eternidad, el Cielo! Esta palabra, Cielo, me llenó el corazón de paz y felicidad, de tal modo que, casi sin darme cuenta, seguí repitiendo durante mucho rato: ¡el Cielo, el Cielo!».

Debemos mantener siempre la mirada en el Cielo, porque «los cielos atestiguan la gloria de Dios» (Salmo 18, 2) y en el Cielo, según anuncia el Apocalipsis (12, 1), aparecerá una señal prodigiosa: una Señora revestida del sol. Escrutando el Cielo, lugar espiritual antes que físico, podremos anticipar la hora trágica del castigo y el radiante triunfo del Inmaculado Corazón de María.

Roberto de Mattei

Traducido por J.E.F en Adelante la Fe