lunes, 19 de octubre de 2020

A PROPÓSITO DE LOS SACRILEGIOS CONTRA LOS TEMPLOS DE DIOS

 

 Ese Nazareno a quien maldecís, no hizo jamás daño a nadie. No sólo creó todo lo que existe, y al hombre para que fuese feliz a su lado, sino que viendo la miseria en la cual el mismo hombre se había sumido por el pecado, derramó su sangre en la Cruz para la redención de todo el género humano. 

Pero los hombres nunca han dejado de ultrajarlo. 

No siempre será así. Aquél que se presentó como manso Cordero y se inmoló a sí mismo, regresará un día con la gloria que le pertenece. Ya no se presentará como un pobre que se humilla ante nosotros, simples criaturas, sino un Dios Todopoderoso que cobrará justicia contra todos aquellos que dedicaron su vida a la iniquidad.

Si al ofender a un rey mortal somos castigados tan severamente, ¿qué le espera a los impíos que no han hecho más que ofender y escupir a la cara del Dios Inmortal durante toda su vida? 

 - W. Garcia

No hay comentarios:

Publicar un comentario