domingo, 17 de marzo de 2013

CRISTO SINDÓNICO* DE CÓRDOBA


Los detalles de la Sábana Santa, convertidos en talla escultórica. No hay otro igual y tiene todo el aval de la comunidad científica que colaboró con Juan Manuel Miñarro en su confección con tanto rigor como devoción.

*Sindónico:
Técnica utilizada -después de su fallecimiento- para demostrar científicamente a qué tipo de tortura fue sometida antes de morir una persona.



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Video tomado  de: Blog San Miguel Arcángel


EL QUE ES DE DIOS ESCUCHA LAS PALABRAS DE DIOS

Desde este Primer Domingo de Pasión, empieza la Iglesia
 a llenar nuestro espíritu de los preparativos de la muerte
 de Jesucristo por la consideración particular de
 los misterios de su Pasión.

Continuación del Santo Evangelio según San Juan (8, 46-50)

En aquel tiempo, decía Jesús a las turbas de los judíos:
«¿Quién de vosotros puede probar que soy pecador? Si digo la verdad, ¿por qué no me creéis? El que es de Dios, escucha las palabras de Dios; vosotros no las escucháis, porque no sois de Dios.»
Los judíos le respondieron: «¿No decimos, con razón, que eres samaritano y que tienes un demonio?»
Respondió Jesús: «Yo no tengo un demonio; sino que honro a mi Padre, y vosotros me deshonráis a mí. Pero yo no busco mi gloria; ya hay quien la busca y juzga. En verdad, en verdad os digo: si alguno guarda mi Palabra, no verá la muerte jamás.»
Le dijeron los judíos: «Ahora estamos seguros de que tienes un demonio. Abraham murió, y también los profetas; y tú dices: “Si alguno guarda mi Palabra, no probará la muerte jamás.” ¿Eres tú acaso más grande que nuestro padre Abraham, que murió? También los profetas murieron. ¿Por quién te tienes a ti mismo?»
Jesús respondió: «Si yo me glorificara a mí mismo, mi gloria no valdría nada; es mi Padre quien me glorifica, de quien vosotros decís: “El es nuestro Dios”, y sin embargo no le conocéis, yo sí que le conozco, y si dijera que no le conozco, sería un mentiroso como vosotros. Pero yo le conozco, y guardo su Palabra. Vuestro padre Abraham se regocijó pensando en ver mi Día; lo vio y se alegró.
Entonces los judíos le dijeron: «¿Aún no tienes cincuenta años y has visto a Abraham?»
Jesús les respondió: «En verdad, en verdad os digo: antes de que Abraham existiera, Yo Soy.»
Entonces tomaron piedras para tirárselas; pero Jesús se ocultó y salió del Templo

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2 comentarios:

  1. Gracias amigo por esta publicación, cuando la vimos por primera vez con mi esposa quedamos impresionados. Pero también reflexionamos cuanto amor tiene nuestro Señor, cuan caro pago por nuestros pecados en sus purísimas carnes, las sensualidades de la nuestra. ¡Oh! Cuan obligados estamos a amar a nuestro Señor y salvador. Dios le bendiga.

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  2. Sobre este Evangelio: Éste fue con poca diferencia el tiempo en que los pontífices y doctores de la ley, confundidos y desconcertados por la resurrección de Lázaro, empezaron a preparar su muerte y como se cree fue decretada este día, la Iglesia toma hoy el luto, quita de sus oficios todo cántico de alegría, cubre sus cruces y altares para manifestar su tristeza y todas sus oraciones indican el dolor y aflicción de que está penetrada.

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