miércoles, 7 de agosto de 2013

LO QUE ENSEÑA EL CATECISMO ROMANO DEL CONCILIO DE TRENTO SOBRE EL BAUTISMO DE DESEO

SAN PÍO V

En virtud de los errores propalados por algunas personas legas, pero aficionadas a la teología, que han hecho subjetivamente sus propias interpretaciones personales sobre la doctrina de la Iglesia sobre este tema, hemos ya publicado un post sobre lo que dice en realidad la Iglesia en relación con el Bautismo de agua, de deseo y sangre. Estos dos últimos aunque no son un sacramento -como el Bautismo de agua- llegan -en determinadas circunstancias (creer en un Dios remunerador y trino, contrición de los propios pecados, etc.)- a conseguir el efecto de borrar el pecado original y alcanzar la justificación.

Esas personas legas -probablemente de buena fe, pero empecinadas en sus errores- lamentablemente han inundado con ellos diversos sitios de internet y han convencido a unos cuantos más legos que ellos con sus negaciones de la doctrina de la Iglesia sobre la ignorancia invencible, el bautismo de deseo y el bautismo de sangre. Aunque no pasan de ser un número verdaderamente insignificante, su intensa labor en la blogósfera los hace parecer como si fuesen muchos. Lo lamentable resulta que han convencido de esos errores a unas cuantas personas buenas y de excelente intención. Por lo anterior, nos pareció fundamental mostrar lo que enseña verdaderamente la Iglesia para poder seguir a ésta, y no a las falsas tesis que sostienen los inventores de errores, quienes -además- anatematizan y llaman "hereje" a todo aquel que no los siga en sus personalísimas interpretaciones. La mejor vacuna contra sus desvaríos doctrinales es leer directamente lo que enseña la Iglesia sin recurrir a subjetivas interpretaciones y valoraciones falsas, como las que ellos realizan tergiversando el claro sentido de los textos, recurriendo -para ello- a mil galimatías y malabarismos para reinterpretar los textos del Magisterio de la Iglesia que les son adversos, pues parten de un principio erróneo preconcebido y tratan de adecuar todo al mismo, sin querer reconocer el genuino significado de los textos que los contradicen. De ahí la conveniencia de ni leer ni discutir con quienes parten de ese sistema de pensamiento preconcebido y prejuicioso, pues de antemano resulta estéril todo intento, ya que no se abren a lo que dice literal y realmente la Iglesia.

Catecismo Romano compuesto por
decreto del Concilio de Trento, ordenado
por el papa San Pío V para los párrocos
de toda la Iglesia Católica.
Por todo ello, nos pareció fundamental reproducir en ese post lo que VERDADERAMENTE ha dicho el Magisterio en este tema. Los comentarios al mismo, también lo enriquecieron mucho pues muestran múltiples citas más de las enseñanzas de la Iglesia. Seguramente todas éstas serán de gran utilidad para los lectores. Quienes no lo hayan leído pueden verlo en el enlace siguiente (no dejen de leer también los comentarios): SOBRE LA IGNORANCIA INVENCIBLE Y LA NECESIDAD DEL BAUTISMO

Posteriormente, leyendo el Catecismo Romano del Concilio de Trento publicado por orden de S.S. San Pío V, encontramos otro excelente texto que habla de la conveniencia de no bautizar de inmediato a las personas adultas sino hasta comprobar que no hay una disposición fingida y están verdaderamente preparadas para el sacramento. Esto está estrechamente relacionado con el bautismo de deseo, como a continuación lo puede advertir por sí mismo cualquier lector, pues este Catecismo señala que si alguien, poseyendo uso de razón, tuviese el DESEO y propósito de bautizarse (lo que implica tener la fe de la Iglesia) y el arrepentimiento de su mala vida, si no alcanzara a ser bautizado con el agua del sacramento, le basta lo anterior para obtener la gracia y la justificación. A continuación transcribimos el texto íntegro.

Dice el CATECISMO ROMANO DEL CONCILIO DE TRENTO publicado por orden de S.S. San Pío V, Parte Segunda, Capítulo II, No. 36:

36. Demuéstrase que a los adultos se ha de diferir el Bautismo
"Pero, aunque sea así, nunca, sin embargo, acostumbró la Iglesia a administrar inmediatamente el sacramento del Bautismo a esta clase de personas (N. de la R: se refiere a los adultos), sino que dispuso que se debe diferir por algún tiempo. PORQUE TAMPOCO LLEVA ESTA DILACIÓN EL PELIGRO QUE ANTES SE HA DICHO AMENAZA CIERTAMENTE A LOS NIÑOS; PUES A LOS QUE ESTÁN DOTADOS DEL USO DE LA RAZÓN, EL DESEO Y EL PROPÓSITO DE RECIBIR EL BAUTISMO Y EL ARREPENTIMIENTO DE LA MALA VIDA ANTERIOR LES BASTARÁ PARA OBTENER LA GRACIA Y LA JUSTIFICACIÓN, SI ALGÚN CASO REPENTINO LES IMPIDE PODER SER LAVADOS CON LA SALUDABLE AGUA. Y por el contrario, parece que esta dilación produce algunas utilidades. Pues, primeramente, como la Iglesia debe procurar con solicitud que nadie se acerque a este sacramento con disposición fingida y simulada, se manifiesta y da a conocer más la voluntad de los que piden el Bautismo; por cuya razón vemos que en concilios antiguos se decretó que los que vienen del judaísmo a la fe católica, pasen meses entre los catecúmenos, antes de administrarles el Bautismo. Se instruyen, por otra parte, con más perfección en la doctrina de la fe que deben profesar, y en las costumbres de la vida cristiana. Por último se da al sacramento mayor culto religioso cuando reciben el Bautismo con toda solemnidad únicamente en los días determinados de Pascua y de Pentecostés".
Tema relacionado: SOBRE LA IGNORANCIA INVENCIBLE Y LA NECESIDAD DEL BAUTISMO

4 comentarios:

  1. Quienes han propagado los errores señalados contrarios al Magisterio de la Iglesia nos han escrito. Sus nombres no importan, pues nuestra lucha por Dios no debe ser tanto personal sino por su doctrina.

    A sus cuestionamientos, una simple respuesta: No nos pregunten a nosotros sino al Magisterio ÍNTEGRO. Ahí está todo en el sentido literal como lo dice la Iglesia. Léanlo sin buscar reinterpretaciones, ni galimatías ni malabarismos. Sin señalar una verdad para contradecir otra que la complementa. Sin absolutizar una en contraposición de otra, pues la verdad comprende varios aspectos. Busquen la VERDAD OBJETIVA tal como fácilmente se entiende y tal y como la Iglesia la enseña en toda su integridad. No partan de ideas preconcebidas para querer ajustar todo a ellas. Sean sencillos como la paloma y prudentes como la serpiente. Crean lo que literalmente la Iglesia enseña en todos los aspectos que se refieren a un mismo asunto. La sencillez les permitirá entender, reconocer y aceptar TODAS las enseñanzas del magisterio sin rechazar lo que no les conviene o lo que contradice sus ideas preconcebidas. No jueguen a la teología para aficionados, al católico le basta CREER lo que enseña la Iglesia. ¡Así de sencillo es!.

    De persistir en negar el Bautismo de deseo enseñado en un Catecismo compuesto por decreto del Concilio de Trento, ordenado por el papa San Pío V para los párrocos de toda la Iglesia Católica, se empeñarían en juzgar una doctrina enseñada por tantos siglos en toda la Iglesia. Estarían condenando a la Iglesia en sus enseñanzas seculares, creyendo que ha defeccionado en la fe. Mostrarían soberbia al sentirse jueces de la Iglesia y suponer que ustedes tienen la razón y no Ella, a la que Cristo dejó la misión de predicar y enseñar su Evangelio.

    El orgullo intelectual de no aceptar con sencillez TODAS las enseñanzas del Magisterio, queriendo contraponer unas con otras, cuando son complementarias, será -si no se retractan de sus errores- algo fatal para sus almas. El juicio propio hizo que los protestantes tomasen verdades complementarias (como por ejemplo el asunto del culto a las imágenes) para absolutizar unas en detrimento de otras. De igual manera ustedes ahora lo hacen. Lutero sabía mucha teología -mucho más que la que ustedes creen saber- y miren cómo acabó.

    No es suficiente estudiar mucho por su cuenta. No basta ser aficionado a la teología sin tener los estudios que la Iglesia imparte. De nada sirven las grandes disquisiciones cuando lo que hace falta es sólo la FE, la sencillez y la humildad para aceptar y creer TODO lo que dice la Iglesia en TODO su Magisterio, sin elegir lo que conviene a sus tesis preconcebidas y rechazar, minimizar o desvirtuar las demás.

    Sabemos que es pedir mucho. Querer una rectificación de quienes han hecho todo un edificio intelectual de sus errores es casi imposible, pero para un alma generosa todo puede ser posible, si se rinde ante la gracia de Dios. Pero para ello se requiere mucha humildad. Rogamos sinceramente a Dios que se las inspire y ustedes acepten su dádiva.

    Ya señalamos que resultan estériles las discusiones cuando no se quiere entender TODO lo que literalmente ya está dicho y enseñado por la Iglesia. Todo se resume en eso, en sencillamente aceptar todas esas enseñanzas en el sentido que están escritas y enseñadas, sin buscarle el que ustedes desearían.

    Las respuestas a cualquier cuestionamiento están ahí: en el Magisterio ÍNTEGRO de la Iglesia. No hay necesidad de explicarlo ni de de buscar reinterpretaciones. Se acepta o no, esa es la cuestión final. Y de ello daremos cuentas un día al Señor. Si han tenido la capacidad de crear toda una superestructura para un error, tienen la capacidad intelectual para desarmarla por sí mismos.

    Pedimos a Dios lo mejor para ustedes y para sus almas. La Virgen los ayude y el Espíritu Santo los ilumine.

    Atentamente
    CATOLICIDAD

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  2. El magisterio íntegro es vayan y evangelicen el que crea y se bautice se salvará. Bautismo de deseo debe ser en casos excepcionales.

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  3. El bautismo de deseo es en casos excepcionales como el de la Beata Kateri Tekakwitha la cual se convirtio al catolicismo escuchando a su madre hablar de Dios.

    Su madre no se atrevió a bautizarla porque pensaba que solo lo podian hacer los sacerdotes y no fue bautizada hasta que pasaron muchisimos años y los nuevos misioneros jesuitas llegaron. Mientras tanto esta niña vivió una vida de completa santidad, amaba intensamente a Dios y deseaba unirse a El, agradarle y entregarle toda su toda su vida, su vida fue una vida de sacrificios y humillaciones que soportó por amor a Dios y sin estar bautizada. Si esta niña hubiera muerto antes de que llegaran los jesuitas habria sido un claro ejemplo de bautismo de deseo.

    http://www.clairval.com/lettres/es/2012/07/17/4180712.htm

    Pero son casos MUY EXCEPCIONALES.

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  4. OLVIDAN LA EXCOMUNION DELPADRE FANEY,QUE GRACIAS A DIOS SE RECONCILIO CON LA IGLESIA?????

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