jueves, 19 de agosto de 2010

EL CARDENAL SANDOVAL NO SE RETRACTÓ ANTE LAS AMENAZAS DE SER DEMANDADO. AL ENTERARSE, EBRARD PRESENTÓ DEMANDA.


El cardenal mexicano, Juan Sandoval, ratificó sus palabras (ver video) relativas a que considera que Marcelo Ebrard y organismos internacionales maicearon (ofrecieron dádivas) a ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a fin de que declararan constitucionales los "matrimonios" y las adopciones gay*.
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"No me voy a retractar. No tengo porque retractarme...Lo dicho, dicho está", aseveró al ser cuestionado con relación a la amenza lanzada por Marcelo Ebrard de demandarlo legalmente si no se retractaba.
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Por su parte, el vocero del arzobispado de Guadalajara, Antonio Gutiérrez Montaño, señaló: "No hay temor de que se inicie un proceso que perjudique al prelado" pues aseguró que éste tiene información que respalda sus señalamientos y que el jefe de gobierno capitalino puede proceder "como guste".
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El verbo "maicear" es un mexicanismo que se empleó mucho durante el porfiriato. Cuando don Porfirio decía "ese gallo quiere ya su maicito**", se refería a algún personaje que se manifestaba contrario al régimen y que empezaba a ofrecer problemas a éste; era silenciado con el otorgamiento de algún empleo o puesto público, alguna prebenda u otro tipo de beneficios. Se decía, entonces, que lo habían maiceado. Era un medio que empleaba el porfirismo para doblegar o también, para asegurar voluntades. El término se sigue utilizando pero con poca frecuencia, hasta ahora que ha causado impacto la declaración del cardenal.
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.*Nota: Nueve ministros votaron a favor de esas reformas y dos en contra.
**Nota: Maicito = Diminutivo de maíz.

EBRARD YA PRESENTÓ DEMANDA

Marcelo Ebrard, el jefe de Gobierno del DF, declaró que ya se presentó una denuncia por daño moral contra el arzobispo de Guadalajara, el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, y contra el vocero de la Arquidiócesis de México, el sacerdote Hugo Valdemar, ante el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (entidad donde gobierna). Arguyó que se pretende defender el estado laico, la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el prestigio del gobierno del Distrito Federal mediante una demanda civil contra el purpurado y contra el portavoz de la Arquidiócesis de México.
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Por su parte, el P. Valdemar advirtió que pese a la demanda en su contra no se retractará de sus declaraciones y agregó que a pesar de que prosigan actos de “persecución en contra de la Iglesia”, ésta no callará ante el atropello de derechos de personas indefensas. El P. Valdemar había asegurado que el gobierno del DF, que encabeza Marcelo Ebrard, había aprobado "leyes nocivas e inmorales, que causan un daño peor que el narcotráfico" a la sociedad. "Mis palabras no faltaron a la ley ni causaron daño moral. No dije una alegoría sino una verdad", aseguró. "No me retracto de mi afirmación, la cual no fue metafórica; el PRD y el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, han causado un daño mayor que el narcotráfico y éste lo puedo comprobar con sus propias estadísticas: en el DF se han cometido más de 42 mil asesinatos de bebés en el vientre de su madre contra 28 mil muertos de la guerra contra el narcotráfico”, agregó.
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Refiriéndose a la demanda en su contra, la calificó como "un uso desproporcionado del poder para atropellar el derecho a la libertad de expresión, ya que sólo expresé libremente mis ideas". "Un gobernante está sometido al escrutinio de sus gobernados y a las críticas, y si no las tolera que renuncie, pero que no reprima a sus ciudadanos con la fuerza", finalizó el portavoz del Arzobispado.
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La demanda de Ebrard exige que tanto el cardenal Sandoval como el P. Valdemar se retracten de sus declaraciones y pidan una disculpa pública. Ebrard señaló que el cardenal debe declarar "que está mintiendo, que el fundamento de sus declaraciones es la falsedad y que reitere él y los voceros de la Iglesia Católica el respeto que me deben".
Ver comentarios
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8 comentarios:

  1. La última resolución de la SCJN acerca del matrimonio entre homosexuales y su derecho a adoptar ha dado mucho de que hablar, y no se esperaba menos, suscitando polémicas inéditas entre autoridades eclesiásticas y gubernamentales, como es el caso del cardenal Sandoval y la demanda que Ebrard ha presentado en su contra.

    Sin detenerme en las expresiones inapropiadas del primero, o en las reacciones poco inteligentes del segundo, por no calcular eventualmente el costo político que conlleva su acción, habría que aprovechar la coyuntura para formar criterios y definir posturas con relación a un tema trascendental, en consideración a la población católica de nuestro país, afectada por las decisiones de la Corte.

    Durante el Encuentro Mundial de las Familias llevado a cabo en esta ciudad en enero del 2009, recuerdo una respuesta que en su momento me fue muy ilustrativa, cuando en entrevista con Adela Micha el cardenal de Tegucigalpa, Óscar Rodríguez Maradiaga, a la pregunta directa de Adela si en la Iglesia no se tolera a los homosexuales, él respondió: efectivamente, no los toleramos, los amamos, resumiendo magistralmente, acorde a la doctrina de la Iglesia, lo que en ocasiones no sabemos expresar ni tal vez vivir algunos que nos llamamos cristianos. Y es que en realidad tolerar es muy poco, locución un tanto mezquina que deja mucho que desear, si consideramos que la dignidad de toda persona emana sin distinción de sexo, raza, tamaño, color, religión o postura política, en ser, imagen y semejanza de Dios. Fundamentar la dignidad de la persona humana en otra realidad resulta bastante complejo si quitamos la Filiación Divina como sustento de la fraternidad universal.

    El oponerse a la relación homosexual, y en consecuencia a este tipo de matrimonios, no quiere decir desprecio a las personas que por una u otra razón tengan esta tendencia, significa fidelidad a una doctrina de la cual la Iglesia sólo es depositaria, en congruencia con lo que dice la Escritura y con la predicación constante de más de 2 mil años, de Padres y Doctores de la Iglesia.

    sigue..

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  2. sigue de arriba...:

    Amar a los homosexuales significa, como también precisara monseñor Maradiaga en aquella ocasión, procurar su bien, es decir, señalarles con respeto pero también con la verdad, cuál es la ética sexual cristiana de acuerdo con las exigencias de Cristo basada en la naturaleza del hombre. Porque si empezamos por no reconocer una naturaleza dada ni las dimensiones éticas de la misma, de acuerdo con el deber ser que exige su perfección ontológica, nos perdemos en un relativismo en donde no hay verdad ni bien que señalar, sino que cada quien tiende a lo suyo.

    En un documento publicado por Juan Pablo II llamado Familiaris Consortio, la Iglesia precisa la atención que hay que dar a los homosexuales, acogiéndolos dentro de la Iglesia y aceptándolos en las familias, haciendo una clara distinción entre la aceptación que debemos a las personas y la reprobación de determinados actos considerados en la Sagrada Escritura como depravaciones graves.

    El Catecismo de la Iglesia Católica aborda directamente el tema en el número 2357, en donde señala, de acuerdo con la Sagrada Escritura y la Tradición de la Iglesia, "que los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados. Son contrarios a la Ley Natural, cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso".

    Y continúa el Catecismo en su número 2358 haciendo referencia a los católicos que se encuentren en esta situación que: esta inclinación objetivamente desordenada constituye para la mayoría de ellos una auténtica prueba. Deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta. Estas personas están llamadas a realizar la voluntad de Dios en su vida, y si son cristianas, a unir al sacrificio de la cruz del Señor, las dificultades que puedan encontrar a causa de su condición.

    El número 2359 continúa diciendo que las personas homosexuales, dentro de la Iglesia Católica, están llamadas a la castidad. Mediante virtudes de dominio de sí mismos que eduquen la libertad interior, y a veces mediante el apoyo de una amistad desinteresada, de la oración y la gracia sacramental, pueden y deben acercarse gradual y resueltamente a la perfección cristiana.

    Estas palabras, sin duda para escandalizar a cualquiera, reflejan las enseñanzas de Cristo, piedra de escándalo en su época y en esta que nos ha tocado vivir.

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  3. Agradecemos su comentario y sus opiniones. Excelentemente redactadas, además.

    Atentamente
    CATOLICIDAD

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  4. El cardenal Sandoval es un valiente, obispos de esos hacen falta, la verdad es una y no admite tergiversaciones ni eufemismos POR USAR EUFEMISMOS ESTAN ESTOS SEÑORES MATANDO NIÑOS NO NATOS Y APROBANDO UNIONES HOMOSEXUALES, COSAS AGRADABILISIMAS SEGURAMENTE A JESUCRISTO, EN FIN, SIEMPRE HAY NUEVOS DEICIDAS PERO QUE BUENO QUE TENEMOS PASTORES VALIENTES PRONTOS A DEFENDER AL REBAÑO CUANDO EL LOBO SE ACERCA RABIOSO A MATARLAS .
    MI MAS SINCERO RECONOCIMIENTO AL SEÑOR CARDENAL, MI ORACION, CARIÑO Y RESPSTO FILIAL A UN PRELADO QUE NO SE ARREDRA DONDE YA SE REGO SANGRE DE OTRO PRELADO, TAMBIEN VALIENTE PADRE Y PASTOR DE SU GREY.

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  5. Concuerdo con el comentario anterior

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  6. Agradecemos mucho sus diversos comentarios.

    Atentamente
    CATOLICIDAD

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  7. felicito estos comentarios y ojala que todos los sacerdotes y monjitas se unan y de ahora en adelante defiendan la iglesia y sus leyes asi como lo hacian todos los martires y renovemos nuestra iglesia como Dios manda

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  8. Pues muy importante que no se retracte. Los hipócritas como Marcelo, como el PRD del DF y como la SCJN, pierden su autoridad para juzgar, dice Jesús: "Porqué miras la paja en el ojo ajeno y no miras la viga que llevas en el tuyo?. Hipócrita, sácate primero la viga que llevas en tu ojo para que puedas decirle a tu hermnao: dejame sacarte la paja que levas en tu ojo.". En cuanto a las amenazas de Marcelo contra el Cardenal Sandoval y el P. Hugo Valdemar no hay que temerlas; Jesús ante la amenza de Herodes de matarlo, le manda decir: "Díganle a ese zorro que yo tengo que ir a Jerusalén a seguir cumpliendo con mi ministerio.", el Cardenal y el P. Valdemar, sino acuden con Marcelo, la SCJN, los diputados del PRD del DF y con los jueces que los citan no es por temor o por mentira, sino porque a las necedades hipócritas no hay que hacerles caso. El gobierno laicista intolerante le guste o no está sometido a Dios, pues la verdad única está en que lo de Dios a Dios, a Dios el primer lugar y la máxima autoridad en todos los sentidos: religioso, político, social, moral, legislativo, Etc., Dijo también Jesús: "Todo poder se me ha dado en el cielo y en la tierra.", no dijo en el cielo nada mas, o solo el poder religioso en la tierra, no no fue así, sino "todo poder se me ha dado en el cielo y en la tierra. Y además el Cesar también le pertenece a Dios, es decir es propiedad de Dios y no del diablo, ni tampoco al reves, pues Dios no es propìdedad del Cesar; "No podemoa obedecer a los hombres antes que a Dios.", todos estos principios religiosos de la Palabra de Dios, todos los gobiernos sean religiosos sean laicos sean laicistas o sean laicistas intolerantes, deben someterse a ellos quieran o no, esa es la única verdad. El señor Marcelo dijo públicamente una mentirota enorme, manipuladora, la cual fue: que todas las religiones y todos los ciudadanos, quicieramos o no quicieramos, debemos someternos a lo que dictara el gobierno del estado laicista o del estado laico: la SCJN, o la Camara de Diputados o la de Senadores o, el Gobierno Ejecutivo, y eso no es así, sino: todas las religiones, todos los ciudadanos, todos los poderes políticos, todos los poderes sociales, todos los poderes legislativos, todos los poderes morales, Etc., debemos someternos a la ley de Dios, nos guste o no nos guste, nos parezca o no nos parezca, nos cuadre o no nos cuadre, estemos de acuerdo o no estemos de acuerdo Dijo Jesús: "La Verdad los hará libres." y en otro lado dijo: "Yo Soy el Camino, la Verdad y la Vida, nadie llega al Padre si no es por Mi.". "Amor y paz en Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo, a los Hombres de Buena Voluntad y a Toda la Humanidad.".

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