jueves, 24 de junio de 2010

DIOS FUE EXPULSADO DEL MUNDIAL


Esta vez nada. No podrán santiguarse, ni elevar las manos al cielo. Tampoco podrán mostrar la camiseta que llevan bajo el uniforme. Ni católicos, ni musulmanes, ni hindúes… nada. La FIFA, todopoderosa, ha expulsado a Dios del Mundial.

Joseph Blatter, heredero de la multinacional que mueve más millones en el orbe, el jefe de la organización con más estados nacionales miembros, acaba de decretar “que cualquier manifestación religiosa debe quedar fuera del fútbol”.

La idea detrás de este “mundial laico” es simplemente “no incitar a la violencia”, tal como lo dio a conocer Andreas Herren, portavoz de la FIFA, pero ¿ha habido alguna vez un enfrentamiento en un estadio por un símbolo religioso?, ¿Cuáles son las verdaderas motivaciones para convertir los estadios en el nuevo escenario de exclusión religiosa?

La prohibición

En un contexto estrictamente deportivo, esta norma parece integrarse al paquete de la amonestación por “festejo desmedido”, que recibe quien celebra un gol quitándose la camisa, o subiéndose a las mallas. Pero como dice Javier Aguirre, del periódico argentino Página 12, “para organizadores de eventos costosísimos como un Mundial, la fe resulta una expresión aun más inquietante que la felicidad”.

Según cuentan diversos medios, la afrenta última que sufrió este organismo en este ámbito fue a manos de Brasil durante la última Copa Confederaciones. Los verde amarillos vencieron tres goles por dos a un inspirado Estados Unidos, luego de estar abajo todo el partido. Pero una vez que este finalizó, jugadores y miembros del cuerpo técnico formaron un círculo al centro de la cancha. Abrazados recitaron una oración de acción de gracias, gesto que provocó un disgusto enorme a Jim Stjerne Hansen, presidente de la Federación Danesa de Fútbol.

El funcionario consideró “inaceptable” el asunto y escribió una carta: “la expresión de fervor religioso de los brasileños duró demasiado tiempo… y provoca una confusión entre religión y deporte”.

Un acto parecido ocurrió en Yokohama, cuando Brasil conquistó su quinto título mundial en Corea-Japón 2002, y varios jugadores dieron mensajes religiosos con frases pintadas bajo su uniforme.

La FIFA tiene reglas muy particulares que gobiernan casi todas las cosas relativas al fútbol. Hasta hace poco, no prohibía los gestos de religiosidad, pero tiene sanciones para textos inscritos bajo la camiseta del uniforme sean políticas, personales o religiosas. Probablemente las camisetas con mensajes cristianos como “Amo a Dios” o “Pertenezco a Jesús” que mostraron los flamantes campeones al finalizar el cotejo, no ayudaron mucho en este tema.

Con la carta en la mano y en los medios muchos millones en juego, Blatter rápidamente acuerpó las declaraciones de Stjerne y envió una señal inequívoca al equipo brasileño con su severa advertencia. No en vano el escritor George Orwell alguna vez dijo que el fútbol era una guerra sin disparos; y aquí los disparos parece que van dirigidos al cielo.


Autor: Gustavo Godínez Vargas

Fuentes: Eco Católico y Panorama Católico Ver comentrios
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4 comentarios:

  1. El Diego lo ve con un rosario (una decena nomás) en la mano y el otro día se persignó siete veces al hilo....

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  2. Qué bueno que no haga caso a esa disposición mal intencionada.

    Un abrazo en Cristo
    CATOLICIDAD

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  3. je. je... Si lo ven a Maradona, se van a dar cuenta que con Dios no se puede.
    Como los jugadores no pueden hacerlo en la cancha, el se persigna por cada uno de los 11 jugadores, y se la pasa pidiendo cuando la cosa esta dificil....
    La FIFA no tiene poder para dejarlo a Dios del mundial El está presente en todos lo que lo amamos y estamos pidiendo mientras sufrimos cada minuto hasta que hacemos gol...
    El domingo nos medimos, amigos mejicanos... que gane el mejor...
    Los dos queremos la copa, pero lo importante es que seamos los latinoamericanos los que la traigamos a casa.
    Cariños.

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  4. De acuerdo Edit. Ojalá quede la copa en hispanoamérica.

    Un abrazo en Cristo

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